Primero fue el paseante, luego su juego, luego su observación y por último su trabajo.
D.U. define una forma de trabajar el urbanismo desde la calle, la pasión, la suciedad y la carne que se pasean por nuestras ciudades
(No más burocracia, por favor. Olvidaos de planes parciales, por favor)
D.U. es el proyecto personal de un peatón y arquitecto que se dio cuenta de que las ciudades no se hacen desde una mesa///
D.U. interpreta los signos que deja el paseante, los modifica, les da continuidad y los combina de nuevo: esboza nuevos significados y propone nuevos significantes/// D.U. es el trabajo de un arquitecto urbanista, y de cualquiera///

28 feb 2010

Chut

C/ Santa Isabel La Real
(obra desaparecida)

Nos encontramos ante una curiosa colaboración entre 3 (quizá 4) autores, que no tratan de ocultarnos la divergencia radical entre sus planteamientos artísticos (podríamos decir vitales).

Sin duda, el primero en actuar, el que tuvo que enfrentarse a la pared en casi-blanco, lo hizo mediante una mancha negra recortada que ilustra lo que parece un jugador de fútbol después de un buen chut. La técnica de la plantilla indica una tendencia objetivizadora y fría, que refuerza el uso de spray negro sobre fondo blanco. Parece que el autor/a trata de informarnos de algo que efectivamente ha pasado, como si lo estuviéramos leyendo en un periódico. Si esto es así, nos parece reconocer un mensaje claramente optimista que emana de esta figura: nos contagia con la energía voluntariosa del delantero que acaba de chutar, al que vemos desde atrás porque es de nuestro equipo, y deseamos que esa pelota que no vemos alance la red rival, sea ésta cual sea...
Cabe la posibilidad de que exista alguna intención crítica (contra el espectáculo del fútbol o algo así) que no alcanzamos a ver. Si es así, se trata de un intento absolutamente fallido.

En cuanto a la siguiente actuación, tendemos a pensar que se trata de las letras blancas "KK", cuya mano nos es conocida y veremos más adelante en estas páginas. Éstas se meten de lleno en el lenguaje objetivista del primer autor (algo que esta segunda mano utiliza constantemente y ha formado parte de su marca de la casa): los colores se invierten tal como se pretende rebatir el mensaje, guardando su pureza, mientras que la tipografía es fría y directa.
La disconformidad de este autor/a presenta una forma de rechazo total a sus predecesores y compañeros (en otra ocasión nos ocuparemos de sus propias obras, las cuales son inusualmente respetadas). No se interesa por la reflexión ni el debate: simplemente quiere decir que todo es una KK. Esta postura nos encanta. No necesitamos más que personas que se lancen a la calle con un pincel en la mano con ganas de decir lo que piensan (o lo que no piensan). Sin esa actitud la expresión urbana, simplemente, no existiría.

Por último, la figura-símbolo en rojo acaba por humillar del todo a la pintada primera. Quizás ha sido obra de dos personas, o de la misma en diferentes momentos (primero el dibujo del pene, y posteriormente el símbolo anarquista), pero nos inclinamos a pensar que no.
Digamos de esta intervención que podría responder a los mismos incentivos que la anterior, pero sin sus sutilidades estilísticas. Un rojo violento viola al jugador optimista, reduciéndolo a estupidez vacua, a signo ingenuo y despreciable. No obstante, reconocemos que la desvergüenza con que se ha realizado este nuevo "punto de apoyo" del jugador, cierra el conjunto de un manera irónica e inconformista que le hace subir varios escalones en nuestra valoración.

Una gran obra.